El invierno es una época en la que hay que tener especial atención a las condiciones climatológicas porque condicionan de manera importante los desplazamientos por carretera. Las heladas, el viento, la niebla o la lluvia son algunos de los factores que pueden dificultar la circulación por la red viaria.
Las condiciones climatológicas adversas del invierno influyen directamente sobre los desplazamientos por carretera y las precauciones que hay que tomar a la hora de ponerse al volante. Desde la Dirección General de Tráfico se pide estos días a todos los conductores extremar la precaución al volante, moderar la velocidad y evitar adelantamientos innecesarios.
> Condiciones adversas en carretera
Además de ello, desde la DGT se pide también una especial atención a los peatones, ciclistas y motoristas a la hora de circular por el riesgo de formación de placas de hielo. Medidas tan habituales como mantener la distancia de seguridad, informarse de las condiciones meteorológicas antes de salir de viaje o viajar siempre con teléfono móvil, se vuelven imprescindibles. Tráfico recuerda también que hay que atender en todo momento las instrucciones de los agentes de vigilancia en las carreteras.
Las condiciones invernales en carretera obligan al conductor a poner todos los sentidos en el cuidado, mantenimiento y revisión de su vehículo antes de cualquier desplazamiento. Una de las partes fundamentales de nuestro vehículo de cara a garantizar nuestra seguridad en carretera con condiciones adversas son los neumáticos. Por eso hay que asegurarse bien de que estén en perfecto estado y en caso de viajar por zonas con nieve, imprescindible llevar cadenas antideslizantes.
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