URGENTE

Prevención de la rabia en deportistas con posible contacto con murciélago

GOBIERNO DE ARAGÓN.

Dirección General de Salud Pública.

A la atención de la Federación Aragonesa de Espeleología.

Envío de recomendaciones de prevención sanitaria sobre la enfermedad de la rabia.

Estimados Sres.:

Debido a que se ha detectado recientemente un quiróptero (murciélago) portador del virus de la enfermedad de la rabia en una cueva de la provincia de Huesca, se remite en documento adjunto un resumen de aspectos importantes para la prevención de esta enfermedad en deportistas que puedan tener en general y en cualquier lugar de Aragón contacto con estos animales.

Rogamos haga difusión de las citadas recomendaciones entre los mencionados deportistas.

Para cualquier aclaración contacten con la Sección de Vigilancia Epidemiológica, de la Dirección General de Salud Pública, en el teléfono 976 71 43 16.

Un saludo

Dirección General de Salud Pública

Servicio de Vigilancia en Salud Pública

Sección de Vigilancia Epidemiológica

Vía Univérsitas, 36 50017 Zaragoza (España-Spain)

epiara@aragon.es

Tel: +34 976 714316

Fax: +34 976 714991

Atención nuevo dominio web SALUD PÚBLICA: http://www.saludpublicaaragon.es

Dirección General de Salud Pública

Departamento de Salud y Consumo de Aragón

Asunto: Prevención de la rabia en deportistas con posible contacto con murciélagos.

Fecha: 2 de septiembre de 2010.

Debido a que se ha detectado recientemente un murciélago portador del virus de la rabia en una cueva de la provincia de Huesca, se resumen a continuación una serie de aspectos importantes para la prevención de la rabia en deportistas que puedan tener en general y en cualquier lugar de Aragón contacto con estos animales.

Un ciudadano belga que estaba fotografiando murciélagos en una cueva de Huesca fue mordido hace 10 días al manipular un murciélago que presentaba un comportamiento anormal. El animal murió al poco tiempo y fue analizado en Bélgica, confirmándose la presencia del virus. La persona ha sido vacunada para prevenir una posible aparición de la enfermedad.

La rabia es una enfermedad grave del sistema nervioso central producida por diferentes tipos de virus de la rabia, que puede afectar a las personas y a los animales tanto domésticos como salvajes. En Europa es muy rara la transmisión a las personas, se han notificado muy pocos casos en los últimos años. Además en la mayor parte de ellos se ha podido realizar la vacunación para la prevención de la enfermedad. Sin embargo, se han producido algunas muertes.

España está libre de rabia tanto en animales salvajes como domésticos, con la excepción de los murciélagos. En los últimos años se han detectado virus de rabia en algunas colonias, en diversos puntos del país. Es muy poco probable que se produzca una transmisión, porque el contacto con estos animales es poco frecuente, no todos están infectados, y la capacidad de transmisión es baja. De hecho, en España no se han producido casos de rabia de ningún tipo en personas en los últimos 15 años. A pesar de ello, en personas que por su actividad laboral o deportiva puedan tener más ocasión de contacto con estos animales es necesario tener en cuenta una serie de medidas.

Por otra parte conviene recordar que los murciélagos son muy importantes desde el punto de vista ecológico al contribuir a regular las poblaciones de insectos de forma natural. Todas las especies de quirópteros están protegidas.

RESUMEN DE RECOMENDACIONES

Se consideran como posibles exposiciones al virus las mordeduras, los arañazos y el contacto de cualquier parte del animal con heridas abiertas o mucosas.

Los grupos humanos de riesgo de exposición a Lyssavirus de murciélagos son:

Manipuladores “habituales”: quiropterólogos, personal de los centros de recuperación de la fauna salvaje, personal de parques zoológicos en cuyas instalaciones haya quirópteros, personal de laboratorios de referencia de rabia e investigadores que realicen estudios sobre Lyssavirus.

Manipuladores “esporádicos”: ornitólogos que instalen durante la noche redes de captura de aves, espeleólogos, personal de espacios naturales protegidos, naturalistas en general, las personas que tengan una colonia de murciélagos refugiada en su casa, escuela o lugar de trabajo y los comerciantes (legales o no) de animales exóticos.

Entre las medidas preventivas, se consideran las siguientes:

Evitar todo contacto con quirópteros. Los quirópteros pueden ser portadores del virus de la rabia incluso estando sanos y sin padecer la enfermedad. Esta precaución se aplicará especialmente con aquellos quirópteros que puedan hallarse en el suelo o fuera de su refugio habitual, o que presenten comportamientos extraños o agresivos. Dicha observación es especialmente importante con los niños.

Realizar la manipulación de los quirópteros protegiéndose las manos con guantes gruesos. Posteriormente la protección utilizada para evitar el contacto deberá lavarse con agua y jabón y a poder ser con lejía.

No tener ni comprar murciélagos como animales de compañía.

Cuando se halle un murciélago fuera de su refugio nunca debe conservarse en cautividad. En tal caso, deben tomarse las adecuadas medidas de prevención y hacer uso de los centros oficiales de recuperación de especies.

Sensibilizar del riesgo y vacunar a los manipuladores habituales.

En caso de exposición, la persona deberá ser atendida en los servicios sanitarios para valorar la exposición y realizar el tratamiento y prevención. En los servicios sanitarios se realizará un examen a fin de evaluar posibles exposiciones inaparentes, común en el caso de mordeduras o arañazos por murciélagos de pequeño tamaño. Todo quiróptero debe considerarse, a efectos prácticos, como posible transmisor de la enfermedad.

El tratamiento preventivo post-exposición debe iniciarse lo antes posible, pero en caso de que las personas afectadas se presenten para evaluación y tratamiento varias semanas o incluso algunos meses después de la mordedura, deben ser tratadas igualmente como si el contacto con el animal rabioso hubiera ocurrido recientemente.

Aunque no es obligatorio, tras la agresión, si el quiróptero está disponible (muerto, moribundo o sano), y si es fácilmente realizable, puede recogerse el animal conservándolo adecuadamente para en caso necesario ser analizado, siempre que el recogerlo y conservarlo no represente riesgos de nueva exposición o contagio. El hecho de no poder recoger el animal para en caso necesario ser analizado no es en absoluto un inconveniente ni obstáculo para acudir a los servicios sanitarios para aplicar el tratamiento preventivo que proceda en la persona agredida. Si el animal está sano o herido y se ha valorado que no hay riesgo se hará uso de un centro de recuperación de fauna silvestre.

Por otra parte, los murciélagos sólo pueden ser capturados con fines científicos y con permisos específicos, emitidos por las autoridades competentes. Es conveniente que las personas autorizadas conozcan la información relevante en lo que concierne a la seguridad en la manipulación de estos animales y estén vacunados contra la rabia.

mas información adicional:

Zoonosis rábica en quirópteros. Manual de buenas prácticas y manejo de murciélagos. Informes, estudios e investigación 2008. Gobierno de España. Ministerio de Sanidad.

http://www.msps.es/profesionales/saludPublica/sanidadExterior/zoonosis_no_alim.htm