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lunes, 10 de octubre de 2011

sondas en el manantial de Itxako

la autorización incluye ocho medidas correctoras para minimizar las afecciones

Con este proyecto, la Mancomunidad de Montejurra trata de analizar las posibilidades reales del acuífero de Lokiz

El departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, a través del servicio de Calidad Ambiental, ha autorizado el proyecto de instalación de sondas en el manantial de Itxako, una intervención que promueve la Mancomunidad de Montejurra.

Este proyecto tiene como objetivo,  analizar la sostenibilidad del recurso hídrico, del que Montejurra extrae agua mediante bombeo. Así, se pretende conocer la información más real posible sobre el manantial y sus recursos. Estos datos se obtendrán mediante la instalación de varias sondas dentro y fuera de la cueva, una labor de la que se encargará el Grupo de Espeleología de Estella-Lizarra. Las citadas sondas cuentan con un sensor y un dispositivo electrónico de lectura y estarán unidas entre sí por una red de cableado de entre 50 y 300 metros. Para su instalación, los espeleólogos utilizarán los accesos subterráneos naturales.
Este dispositivo va a permitir a la Mancomunidad de Montejurra conocer a tiempo real la situación del acuífero de Lokiz. La recogida de datos se realizará con tres inspecciones anuales, una de ellas en la época de máximo estiaje.
medidas La autorización de afecciones ambientales del Gobierno foral incluye una lista de medidas correctoras a las que deberá ceñirse el proyecto. Se trata de hasta ocho condiciones que tratarán de minimizar las posibles afecciones que pudieran producirse.
Así, Medio Ambiente insta a contratar un técnico especialista en fauna de cuevas para garantizar que la instalación de las sondas se realice sin producir molestias a la fauna. En la misma línea, se pide a la Mancomunidad de Montejurra que contacte previamente con el Guarderío de Urbasa para la inspección de la zona. En tercer lugar, se recomienda que la colocación del cableado sea manual para evitar la emisión de gases, humos o ruidos.
La cuarta de las medidas correctoras vuelve a centrarse en la fauna, de manera que se insta a llevar a cabo la colocación de los sistemas en los meses de julio y agosto y en los de diciembre a febrero para evitar molestias a la colonia de murciélagos de la cueva. En la misma línea, la quinta recomendación señala que durante el trabajo en el interior se deberá tener especial cuidado con no alterar ningún elemento de la cueva, especialmente las estructuras ligadas con los hábitats de la fauna.
Por otro lado, en las siguientes medidas correctoras el departamento de Medio Ambiente solicita ser informado. Así, requiere un informe que refleje con detalle dónde han quedado instaladas las sondas y el cableado que las une.
En séptimo lugar, el Gobierno foral insta a solicitar con 48 horas de antelación la entrada de los técnicos de la sección de hábitats antes de proceder a realizar las recogidas de datos de las sondas.
La última de las recomendaciones de Medio Ambiente recuerda la obligación de desmantelar la instalación cuando ya no sea operativa.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Creo que no es correcto hablar de "máximo estiaje"... la estiaje se corresponde con la mínimo caudal, es decir no hay mínimo o máximo estiaje.