intervenciones en la montaña

Las salidas de salvamento y búsquedas repuntan durante el otoño . La mayoría de las actuaciones de socorro se concentran en cumbres asequibles, cerca de los núcleos urbanos

Las adversas condiciones meteorológicas, la imprudencia y las afluencia masiva a las montañas disparan las intervenciones

Superados los calurosos días de verano, la montaña se convierte en una alternativa de ocio ineludible para miles de vizcaínos. Pasear, practicar trekking, escalada y, sobre todo, coger setas son unos reclamos irresistibles para calzarse las botas, coger el bastón y emprender la ruta hacia las alturas, aprovechando los últimos días de climatología favorable. Esta salida en masa a las cumbres provoca un "importante" aumento de las operaciones de rescate y búsqueda, debido en gran medida "a la afluencia masiva de personas que salen a buscar setas", apunta Pedro Anitua, director de Atención de Emergencias y Protección Civil del Gobierno vasco.

Las estadísticas ratifican que las buenas condiciones meteorológicas y el tiempo libre están directamente relacionadas con el aumento de las intervenciones de socorro. Julio, septiembre y octubre son los meses con mayor volumen de operaciones, una actividad que se dispara durante los fines de semana. "Mientras las búsquedas se elevan al doble, los rescates se multiplican por cinco", explica Anitua.

Una luxación, un simple esguince o una mala caída en una zona aislada y sin compañía suponen una grave complicación que sólo puede solventarse con la ayuda del personal especializado en rescate. En la mayoría de los casos, la única salida está en una llamada al 112. El personal de SOS Deiak analiza la situación, valora el alcance del accidente y despliega los recursos necesarios. Las operaciones son coordinadas por técnicos de Emergencias y Protección Civil, que tiene a su disposición a una treintena de efectivos de la Unidades de Montaña de la Brigada Móvil de la Ertzaintza. En los casos más complicados, es necesario recurrir a miembros de la Cruz Roja, la DYA, especialistas de la Federación de Montaña o espeleología e, incluso, aprovecharse de las excelentes dotes de búsqueda del perros de salvamento.

Los recursos desplegados dependen, en gran medida, del lugar del suceso. No es lo mismo un rescate en una sima, en una cumbre, en un barranco o en un monte de poca entidad. De hecho, la mayoría de las intervenciones de Emergencias se registran en cumbres accesibles, próximas a núcleos de población. En este ranking ocupa un lugar destacado el Gorbea, seguido de la Sierra de Aralar, Azkorri y el Cresterío del Anboto, zonas clásicas del montañismo vasco.